Sociable, multipantalla, multitarea y fiel a las marcas serían los rasgos principales del consumidor de información de hoy en día, según un estudio del Interactive Advertising Bureau, recuperado estos días debido al último Mobile World Congress celebrado en Barcelona. Un congreso que Intermedia ha tenido ocasión de vivir intensamente a través de dos firmas notables de nuestra cartera de clientes.

Hablamos de un consumidor sociable porque suele compartir vía Whatsapp, Instagram, Twitter, Facebook o LinkedIn aquellos contenidos que considera interesantes. Multipantalla, porque la información no le llega por una sola pantalla, sino por una combinación continuada de pantallas, que interrelaciona constantemente: básicamente, el ordenador (cada vez menos utilizado), el smartphone y la tablet. Multitarea, porque puede utilizar simultáneamente dos o tres pantallas a la vez: mientras mira la TV chatea con sus grupos de Whatsapp y consulta de vez en cuando las redes sociales. Un consumidor, en una palabra, interactivo.

Por último, pero no en último lugar, estamos ante un consumidor que a la hora de informarse suele ser fiel a las marcas. Es decir, en este caso, a las cabeceras.

Hace tiempo que decimos que los periódicos y las emisoras de radio o televisión, que antes tenían lectores, oyentes o televidentes, ahora tienen «seguidores». «Followers». Un seguidor es una persona que se identifica con el punto de vista de la persona o entidad que sigue, se informa a través de él y se siente parte de la misma comunidad. Una cabecera o una cortinilla vendría a ser pues como una marca que tiene que competir con otras marcas a través de todo tipo de soportes. Hasta hace poco, este soportes eran en papel de periódico, radio o televisión. Y los grandes grupos editoriales debían disponer de una buena emisora de radio para que su «seguidor» pudiera oír el mensaje por la mañana, desde casa o el coche; un buen diario de papel, para irlo desarrollando a la hora del café, y una televisión por si fuera poco la noche.

Hoy en día esta parrilla horaria ya no es suficiente. Ahora las redes sociales permiten que cualquier usuario pueda convertirse en emisor de información u opinión a cualquier hora y en cualquier momento, para interactuar (y crear opinión pública) con otro usuario. Recordemos que ambos, emisor y receptor, son interactivos, sociables, multipantalla y multitarea.

Una especie de usuarios, y esa es la buena noticia para el periodismo honrado, que continúan dando mayor credibilidad a los medios de comunicación por delante de otros emisores de información menos profesionalizados.

¡Cuidémoslo!